LOS CAJEROS O CHIROCOS DE SANTIAGO DE CHUCO

 (Para mi amigo el Dr. Hugo Castillo Aguirre)

Dr. Javier Delgado Benites (*)

Según referencias históricas, en el siglo XVIII entre los años de 1782 y 1785 el obispo de Trujillo, el religioso español Baltasar Martínez Compañón comisionó pintar 1300 acuarelas sobre costumbres de su jurisdicción, en las concernientes danzas se encontraron veintiún acuarelas que representan a músicos ejecutantes en forma simultánea de la caja y la flauta. De igual manera en las ilustraciones del cronista indígena Felipe Guamán Poma de Ayala se encuentra un hombre tocando un pequeño tambor sosteniendo una flauta. Existen hallazgos también de estos dos instrumentos musicales que componen la flauta o roncadora que podrían ser considerados como antecesores desde épocas precolombinas pudiendo mencionar el caso de los silbatos y tambores de arcilla de las culturas pre Incas como Mochica,  Nazca, se sabe de esta existencia por hallazgos arqueológicos e iconografías en objetos sólidos.

El cajero llamado también Chirico, siendo este último término una palabra culle que significa persona que toca una caja con su flauta.

Los cajeros o chirocos dos o más músicos que tocan los instrumentos de viento y percusión en relación al tipo de música que van deleitar como huaynos, marineras, pasillos, valses y cumbias. Utilizan sombreros de palma, visten normal como cualquier ciudadano del lugar.

Los cajeros o chirocos son músicos que ejecutan en forma simultánea la caja y la flauta. Tienen una gran representatividad en la fiesta patronal del mes de julio en honor al Apóstol Santiago “El Mayor”. También son responsables de amenizar las festividades religiosas y costumbristas de los diversos distritos y caseríos de la provincia de Santiago de Chuco, entonan música alegre y de ritmo contagiante que hacen bailar a todos los pobladores y visitantes.

Las mojigangas emblemáticas como los Pallos, las Quiyayas y otras, van acompañados de un solo cajero o chiroco que toca sus sinfonías para que bailen.

Los dos principales instrumentos musicales que usan los cajeros o chirocos son:

La caja.- Instrumento de percusión, de forma cilíndrica de un diámetro de 70 cm y 25 cm de fondo, antiguamente se construía de corteza de sauce o eucalipto (en la actualidad se usa triplay), los aros son de tallo de árboles, el pergamino que se emplea es piel pelada de vacuno o res, guacho u ovino, chivo, antes se usaba pieles peladas de animales silvestres como del venado o zorro, los templadores son de algodón, fibra de penca o cabuya, están sujetados con una correa o faja que cruza el hombro para poder sostener dicho instrumento y poder caminar. La caja sirve para acompañar y acompasar las melodías que emite la flauta o roncadora, este instrumento se usa para tocar huaynos, cumbias y otras melodías.

La caja emite su percusión por la guaytana o golpeador, que al momento de golpear emite un sonido contundente, es elaborado de guarauya, piel de res y lana de guacho, dándole la forma de hisopo, cocido con cabuya o hilo de nailon, dispone de un cordelillo que se asegura en la muñeca para evitar su perdida.

La flauta.- Instrumento de viento, que se usa para expresar el sonido que se desea entonar, emitiendo un sonido suave, tiene una longitud de aproximadamente 50 cm es de forma curvada, en la parte superior tiene una boquilla de 5 cm en cuyo interior tiene una embocadura con grada, cerrada por un taponcito de aliso. Tiene cinco agujeros de 7 mm (4 frontales y 1 posterior) la cual es manejado por la mano y así obtener las notas musicales y echar al aire la melodía. El diámetro interior del tubo es de 11 mm y el exterior de 24 mm. Elaborado de carrizo, guarauya o sauco y en algunos casos de tubos de plástico. Es usado para tocar huaynos, marineras, cumbias y otras melodías.

La roncadora, es más grande que la flauta, tiene una longitud aproximadamente de 56.5 cm. Este instrumento elaborado a base de carrizo y en algunos casos de plástico, de características ancestrales es propia de las diferentes zonas andinas del norte del Perú.

Los instrumentos usados por los cajeros o chirocos de Santiago de Chuco, adquieren particularidades específicas de acuerdo a cada lugar o región, distinguiéndose en su morfología como en los diversos modos de interpretación. Se usan para expresar sonidos que se desee armonizar, especialmente para tocar huaynos, marineras, cumbias y otras melodías; estos instrumentos oriundos funcionan con autonomía en oposición a las bandas de músicos. Su articulación a los tiempos modernos es una forma de resistencia en la continuidad de la cultura y es la reafirmación de los valores tradicionales, a pesar que existe tendencia a perder la memoria musical, incorporando la ejecución de un cancionero moderno.

Como epilogo, quisiera saludar a la Asociación Santiaguina El Fogón, que cada año en la fiesta de julio, viene organizando el concurso de cajeros, con el único fin de revalorar a nuestros músicos ancestrales de la provincia de Santiago de Chuco, para darle presencia y no nos arranque la globalización que hace cada día perder nuestra identidad cultural.

(*) Doctor en Educación, ingeniero químico, licenciado en educación, investigador del Instituto de Investigación en Ciencias y Humanidades, directivo del Movimiento Capulí, Vallejo y su Tierra, docente universitario.

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