EL PENSAMIENTO EDUCATIVO DEL DR. CARLOS SALAZAR ROMERO
Dr. Javier Delgado Benites (*)
El Dr. Salazar Romero, fue
historiador, filósofo, profesor secundario y universitario, funcionario
público, político, periodista y abogado; pero sobre todo un maestro que vivió
el amor pedagógico hasta convertirse en un verdadero mártir de la educación
peruana.
Pocos de las personas en el Perú, se
han dedicado a estudiar con sensatez y formación adecuada, el problema de la
crisis de la educación, principalmente del nivel secundario. Varios han erguido
sus palabras para denunciar la crisis y señalar una relación de causas y
defectos, pero han sido pocos las personas versadas que se han dedicado a
estudiar e investigar y señalar rumbos concretos con fundamentos pedagógicos.
Su preocupación principal estuvo dirigida a estudiar la crisis en que desde
hacía varios decenios se debatía la educación secundaria. Este insigne maestro
que camino con pasos seguros y eficientes que fue muy útil en el país en su
momento quien volcó todos sus conocimientos.
Escribió una fructífera obra con
respecto a la educación en el país. Su preocupación por este sector fue
continua y casi permanente, lo cual se refleja en las ideas plasmadas en sus
libros, folletos, revistas, conferencias, conversatorios, etc. En todo lo que
sea conveniente con tal de manifestar sus ideas educativas.
Con respecto a la educación, en
(1971), se expresa: “La educación es un fin en sí misma en cuanto constituye el
elemento primario para la autorrealización del ser humano, para su
participación en el universo y en la comunidad y para el desarrollo de las
facultades espirituales y tecnológicas que han de servirle en la conquista de
la naturaleza y para el éxito de la vida de la sociedad” (1).
Continúa el maestro limeño diciendo: “La
educación contribuye al mismo tiempo a una más adecuada distribución del
ingreso, al proveer de oportunidades para lograr una más alta productividad,
una más elevada remuneración y una mayor conciencia de sus derechos a los
sectores menos favorecidos de la sociedad. Y no menos importante la educación
prepara al hombre para el goce de la riqueza productiva, para su
perfeccionamiento individual y para su contribución más plena en todos los
aspectos de la vida social” (2).
Su concepción amplia e integral de la
educación nacional, lo llevó a buscar la integración del elemento indígena a la
vida nacional por medio de la educación como base para la realización de un
cambio profundo en la estructura sociológica del país. En tal sentido, Salazar Romero (1969)
manifiesta lo siguiente: “Tenemos que prever el futuro inmediato de acuerdo a
este criterio y esto lleva implícito a buscar la integración social y cultural
de los millones de habitantes indígenas, valiosísimos en potencia pero que
actualmente todavía se encuentran en otras etapas de la historia y viven en un
exilio social y cultural que los convierte en un peso muerto para el país.
Solamente la educación y nada más que la educación podrá liberarlos de ese
exilio” (3).
Salazar Romero absorbe perfectamente
esta nueva modalidad que presenta la educación en el país y comprende
perfectamente que es inconveniente llevar a esta masa de adolescentes a tocar
las puertas de las universidades y que es necesario darle una nueva estructura
a la educación secundaria. Era partidario que la educación en el país sea
total, sin distinción de género y en todas las regiones y comunidades con
diferentes etnias, porque es un derecho que a todo peruano le corresponde, para
ello manifiesta lo siguiente: “Todos quieren estudiar, desde los más humildes
en los villorrios más apartados la educación es el único medio de movilidad
social. Nada los detiene, todo los incentiva. Esta aspiración tan acentuada, es
la gran fuerza que está haciendo de la nuestra una sociedad de cambio
acelerado. En el Perú hay que proveer educación para todos, cada uno o cada
grupo de acuerdo a sus circunstancias o necesidades, pero para todos. Esta
fuerza valiosísima, que es quizás el mejor capital que tenemos en este momento,
debemos canalizarla a través de la educación, de una educación diversificada,
con distintos caminos, distintos cauces, para dar a cada cual las mejores
posibilidades dentro de sus capacidades naturales” (4).
Continúa revelando: “El Perú entero ya
ha despertado y está en proceso de gran superación. Con la educación estamos
llegando a todos los peruanos y debemos hacerlo culturizándose y necesitamos
darle a cada uno la cantidad y calidad de educación que necesita, mediante un
Sistema Polivalente que llegue por igual, con la misma eficacia, a todas las
regiones del país, a todos los grupos étnicos, culturales y sociales” (5).
Como maestro universitario y por la experiencia
ganada en el desempeño de diferentes cargos, referente a la universidad,
expresa lo siguiente: “El rol de la universidad es muy vasto en sus
implicaciones culturales y más aún en las educacionales” (6).
Por otro lado el Dr. Salazar Romero,
como un estudioso y partidario de la Educación Técnica en el País, pero de una
Educación Técnica que contribuya al desarrollo económico, siente una esperanza
en ello tal considera que: “En el Perú hay una gran esperanza sobre lo que la
Educación Técnica puede hacer para contribuir al desarrollo económico del país,
para contribuir a su industrialización, esta esperanza es muy ambiciosa. Se
cree que nuestro país necesita de técnico para realizar todas aquellas empresas
industriales que están esperando la mano del hombre para explotar la riqueza
potencial de nuestro territorio” (7).
Así mismo el experto sigue indicando
que la Educación Técnica cuyo fin sea producir, generar empresa, donde el
técnico sea un empresario potencial, como relata: “Se cree que la Educación
Técnica va a traer como consecuencia producción, que es lo que se necesita.
Pero estas especialidades se refieren todas a servicios y a través de servicios
vamos a reparar, a mantener, pero no vamos a producir, no vamos a crear
riqueza. No puede haber creación por más que se difunda la Educación Técnica,
así como está concebida solamente de servicios de reparación y mantenimiento.
La especialidad de electricidad, destinada a componer artefactos; la
especialidad de automotores, destinada también a la reparación de automóviles;
carpintería, destinada a trabajos de muebles sencillos, etc. Todas estas
especialidades así dedicadas a servicios, por más que las mejoremos, por más
que tecnifiquemos su enseñanza, y por más que traigamos lo más adelantado en
metodología y material, nunca se va a cumplir la aspiración del país, que es
tener una Educación Técnica de otro tipo, de otro género, una Educación Técnica
que esté basada en ocupaciones de producción, en ocupaciones de manufactura, en
ocupaciones de construcción, o sea los medios por los cuales se puede crear
riquezas” (8).
Implantó el sistema tutorial como un servicio de orientación y guía del alumno, realizando a través de un contacto personal del tutor con el alumno, dentro y fuera del aula de clase. Este sistema llenó un vacío que tenían los colegios, sobre todo los estatales, en que el alumno escuchaba la clase del docente pero no tenía la oportunidad de dialogar con alguien que le sirviera de guía o consejero.
Es loable que la institución superior que llevaba su nombre en Chimbote, como un gesto de desprendimiento ha hecho un evento académico, rindiendo un homenaje por su nacimiento, para resaltar su legado en la educación peruana, reconocer la trayectoria académica. Espero que hoy día se dé el inicio y se continúe esta fecha como parte de la identidad institucional.
Muchas gracias.
Nuevo Chimbote, 20 de noviembre del
2021
Hora: 12 m.
REFERENCIAS
(1)
Mercurio Peruano (1971). “Carlos Salazar Romero, Bibliografía y Homenaje”. Lima, pág. 6.
(2)
Idem., pág. 6.
(3)
Carlos Salazar Romero (1969). “Pedagogía y educación en el Perú. Estudios
críticos sobre ideas y realizaciones”. Lima., pág. 55.
(4)
Idem., pág. 59.
(5)
Idem., pág. 68.
(6)
Idem., pág. 72.
(7) Idem., pág.
79.
(8)
Idem., pág. 79.
(*) Doctor en
educación, ingeniero químico, licenciado en educación, investigador del
Instituto de Investigación en Ciencias y Humanidades, directivo del Movimiento
Capulí, Vallejo y su Tierra, docente universitario.
Textos que pueden ser
reproducidos
citando autor y
fuente
INSTITUTO DE
INVESTIGACIÓN EN CIENCIAS Y HUMANIDADES
Celular: 943467062
RPM # 943467062
E-mail: i2cyh@outlook.es
Lima – Chimbote – Trujillo
Comentarios
Publicar un comentario