LA CHICHA EN EL BARRIO SANTA MÓNICA DE SANTIAGO DE CHUCO
(Homenaje a las mujeres que siguen haciendo la chicha en SCH)
Dr. Javier Delgado Benites (*)
La chicha fue la bebida
sagrada de los incas, en mi terruño de Santiago de Chuco lo preparan las
mujeres, con todos sus ingredientes y secretos, es conocida también con los
nombres de la baya o colorada.
En mi niñez en mi
barrio Santa Mónica me gustaba ver a los campesinos y jóvenes del barrio cuando
libaban o tomaban un capri de chicha con sus amistades, personas mayores, de
otros barrios o lugares, en las reconocidas chicheras donde vendían la
deliciosa bebida colorada. Siempre existe la costumbre de las personas que
brindan un buen vaso de chicha que al terminar arrojan al suelo algunas gotas que
sobra; muchos lo practican sin saber que desde tiempos ancestrales se reconocía
a la madre tierra, brindándole esas gotas como agradecimiento por sus frutos.
La chicha en
Santiago de Chuco su elaboración es bien conocida, se hace sometiendo a cocción
la jora o maíz germinado, por varias horas, luego se enfría y se llena al
cántaro o urpo donde se le agrega chancaca o azúcar, se le pone a fermentar por
varios días, cuando más días, la chica se fermenta y se vuelve más fuerte. Así
surge el alcohol etílico que puede variar al 3 y 20%.
La chicha de jora
tiene análisis químico efectuado por el Dr. Herminio Valdizán (la medicina
popular, pág. 102) ciñéndose a la balanza de Thor. Su densidad es 1020 su
composición química, acidez total es ácido láctico 1728, alcohol (destilado)
12200 y alcohol (según ebullómetro) en extracto seco a 1000, 13000 cenizado
0.460, anhídrido carbónico total (002) 0.2027, glucosa 6.6505, almidón y
dextrina 7.086, azoe total (002), 0.0986, cloruros (Na. 01), 0.961 y fosfatos
(Ps. 02) 0.26.
Una de las cosas más
gratas para todo santiagochuquino era tomar entre amigos la apetitosa chicha, acompañado
de su pan de agua con su rocoto molido en batan o entero cortado en rodajas con
sal, esas reuniones hacían prosperar la amistad y despica el ardor de un buen
rocoto de temple que se ha comido.
La chicha
preparada por algunas reconocidas chicheras del barrio Santa Mónica que bastaba
dos vasos servidos para embriagarse. Cada uno de ellas tenían sus secretos bien
guardados para elaborar la chicha, siendo reconocidas por las personas.
Algunos campesinos
rimadores en las coplas picaras, hacían mención de las chicheras (la mayoría
descansan en paz) del barrio Santa Mónica y decían:
La chicha de ña
Justina
le doy a la china cuando
camina
La chicha de ña
Tomasa
le doy a la china
que está buenaza
La chicha de ña
Carmen
le doy a la china
para que lo arme
La chicha de ña
Victoria
le doy a la china
para que se ponga en la gloria
La chicha de ña
Jesús
le doy a la china
viajando en el bus
La china de ña
Elena
le doy a la china
para que no tenga pena
La chicha de ña
Sarca Dolores
le doy a la china
para calmar los rencores.
En la actualidad la
chicha en Santiago de Chuco se continúa preparando pero en menor escala, es
mucho más familiar que se prepara en casa para eventos especiales de reunión
familiar y de amistad.
Por tal motivo, se
pide a las familias de Santiago de Chuco que sigan preparando la chicha, porque
es una de las bebidas mucho más saludable, y es parte de la costumbre de antaño
de las familias y es necesario volver a reivindicarlo por el bien de la
colectividad.
Salud.
(*) Doctor en
educación, ingeniero químico, licenciado en educación, investigador del
Instituto de Investigación en Ciencias y Humanidades, directivo del Movimiento
Capulí, Vallejo y su Tierra, docente universitario.
Textos
que pueden ser reproducidos
citando
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