LA QUEBRADA DEL GALLINAZO EN SANTIAGO DE CHUCO
Dr. Javier Delgado Benites (*)
La quebrada del gallinazo en mi permanencia en mi tierra natal, lo he frecuentado siempre, mi padre tenía un terreno por ahí cerca, donde sembraba todo el año y amarraba sus animales, que, al salir en la tarde de la escuela o el colegio, tenía que ir a traerlo a la casa, y teniendo conocimiento de lo que nos contaban, íbamos con temor, que el carbunco se presente en esos momentos.
La quebrada del gallinazo, cruza el camino que se va a Huayatán, es una vertiente que se desvía del canal Vicente Jiménez, que trae agua al pueblo de Santiago de Chuco de las alturas, sus aguas fluyen por la acequia del costado del camino que se va al cerro San Cristóbal y otros pueblos aledaños, confluyendo sus aguas en el río Santa Mónica.
La quebrada es llamada así, porque el lugar era el hábitat de los gallinazos, aves carroñeras de plumaje negro lustroso, la cabeza y el cuello no tienen plumas y su piel es gris oscuro y arrugada, de alas anchas, pero relativamente cortas, las bases de las plumas primarias son blancas, produciendo una mancha blanca en la parte inferior del filo del ala, que es visible cuando vuela, su cola es corta y cuadrada, apenas sobrepasa el largo de las alas plegadas, se posiciona para descansar, anidar y esperar olfatear algún animal muerto para ir tras de su presa y disfrutar su alimento.
En aquel lugar los gallinazos vivían y se reproducían, hasta que en un día menos esperado por las épocas de los años 60 desaparecieron del lugar, emigrando con destino a la costa, hasta ahora no se encuentra a ninguno, solo ha quedado el nombre como recuerdo a dichas aves carroñeros, que algún tiempo fue su hábitat.
Según referencias de gente y familiares, que han transitado, en media noche o en las madrugadas, se les ha presentado el CARBUNCO, que es un perro de color negro con sus ojos rojos que reflejaban el fuego, que los ataca, cuyas manifestaciones eran desmayarse, pero otros, que sabían que el lugar era malo iban preparados y llevaban sus cuchillas de acero para protegerse y ahuyentarlo.
Un
amigo que vivía cerca de la quebrada, me comentaba que gente que transita por
el camino a Huayatán, observa en algunas oportunidades a una gallina con sus
polluelos de color amarillo por el camino, que al quererlo coger se desaparece
en la quebrada.
MI ABUELO Y EL CARBUNCO
Quiero compartir lo que mi padre nos narraba a la familia cuando éramos niños sobre su padre (mi abuelo en su juventud).
Había sembrado en la chacra maíz y estaban en choclo, pero la gente iba a robar en la noche, para ello, tenía que ir a cuidar todas las noches, después de merendar (cenar), partía a quedarse en el pajero (casita rural).
Una noche se va a cuidar y se encuentra en el trayecto por la Poza con amigos, que le invitaron ir a una casa de uno de ellos a jugar naipes (cartas o casino), tan entretenido estaba el juego, que mi abuelo al darse cuenta, eran las doce de la noche, donde decide partir a cuidar, se despide de los amigos, el silencio del lugar en la noche, ninguna alma caminaba, al cruzar la quebrada del gallinazo, sintió algo raro, que los pelos se pusieron en punta, al voltear se da cuenta que en su tras, lo seguía un perro grande negro que en la frente tenia un ojo que irradiaba una luz roja, mi abuelo la desesperación, comienza a correr y el perro lo perseguía, al llegar a una laja, se sentía atacado por el animal, la reacción inmediata fue sacar del bolsillo de su saco una cuchilla de acero marca toro, que lo tiró con fuerza, en ese momento el animal desapareció, pero sufrió un gran susto, que lo hizo ir reponerse y dormitar en el pajero. Al amanecer retorna por el lugar del suceso para poder buscar la cuchilla, lo encuentra incrustada en una penca grande, lo saca y retorna a su casa del pueblo, para después de un período largo contar a sus padres.
Ese suceso que había vivido, sirvió de escarmiento, prefería ir temprano a cuidar, hasta la cosecha del maíz.
Santiago de Chuco, invierno del 2017
(Fotos del Autor)
(*) Doctor en educación, ingeniero químico, abogado, licenciado
en educación, investigador del Instituto de Investigación en Ciencias y
Humanidades, directivo del Movimiento Capulí, Vallejo y su Tierra, docente
universitario.
Textos que pueden ser reproducidos
citando autor y fuente
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