RECORDAR A MI MADRE EN MI CUMPLEAÑOS

Dr. Javier Delgado Benites (*)

Mi madre Aurora Benites de Delgado, fue una mujer extraordinaria y una madre virtuoso, una guía en mi vida que me ayudó con sus orientaciones sinceras a encontrar mi camino correcto.

Celebrar mi cumpleaños el 16 de diciembre con mi madre en Santiago de Chuco, lo que recuerdo mientras mi estancia hasta los 17 años de edad, en mi hogar familiar era significativo, mi madre el día anterior decía: – Mañana es el cumpleaños de mi hijo.

Ella planificaba y alistaba las cosas que iba utilizar en la preparación del almuerzo, el potaje que acostumbraba y era preferido por toda la familia era el cuy guisado con su respectiva entrada.

Al llegar el día, mis padres eran los primeros que me saludaban y luego mis hermanos, todos en el hogar estaban esperando, que ese día iban a comer delicioso, hechos por las manos de mi progenitora.

Mi madre al iniciar el día, preparaba un delicioso desayuno y el almuerzo acostumbraba preparar cuy guisado, con papas amarillas y graneado de mote, previo a ello, una entrada de jamón, con rosquitas, lechuga y zarza o gallina en fiambre.

Por cumplir años, me servía un buen trozo de cuy de preferencia la parte pierna, esos instantes los comensales que me acompañaban en la mesa lo disfrutaban sin hablar, porque todos estaban concentrados disfrutando el agradable potaje, luego de ello, se asentaba el almuerzo con su aloja. Eso era la celebración de mi cumpleaños en mi hogar en Santiago de Chuco.

Cuando me ausenté por mis estudios universitarios, mi cumpleaños lo celebraba solo, un día anterior antes de cumplir años llegaba una encomienda, donde me enviaba unos trozos de cecinas fritas con cancha, ñuñas y pan, acompañado de una carta motivadora que me escribía mi madre, donde me enviaba sus respectivos saludos de la familia, y me indicaba que siga estudiando, porque eso era la única forma de lograr la meta de ser profesional, que al leerlo tomaba las fuerzas necesarias para seguir bregando en el camino de lograr ser ingeniero químico.

Cuando me encontraba trabajando, ella seguía enviándome las encomiendas, me llamaba por teléfono, para saludarme y deseándome lo mejor en mi cumpleaños, me alentaba seguir trabajando con responsabilidad y honradez, en algunas oportunidades viajaba a Trujillo, donde nos reuníamos con mis hermanos para celebrar.

Cuando mi madre, se vino en el año 2012 prácticamente a radicar a Trujillo por la enfermedad de mi padre, desde esa fecha mi cumpleaños lo pasaba con mis padres, compartíamos en casa, con mis hermanos, donde disfrutábamos instantes bonitos.

Al fallecer mi padre en el año 2017, mi cumpleaños lo celebraba con mi madre y mis hermanos en casa o en algún lugar aparente, pasábamos momentos agradables y significativos, que vivirán en el recuerdo por siempre.

Ahora que mi madre, se ausentó de este mundo terrenal, me estaba preparando a celebrar con ella, otro año más de mi existencia, como todos los años; pero las circunstancias de la vida, no lo ha permitido celebrar otro año a mi lado, es triste no tener a mi madre que tanto lo amado, me iré acostumbrando a celebrar sin ella físicamente, pero presente en mi mente y en mi corazón. Estoy seguro, que este día 16 de diciembre que es mi cumpleaños, lo celebrarán en el cielo junto a mi padre y mi hermana Elizabeth. Ellos que tanto me quisieron serán la luz perpetua que me guiarán y me acompañarán a alcanzar las metas que tengo y vivir en unión con toda la familia.

(Fotos del autor)

 

 

(*) Doctor en educación, ingeniero químico, abogado, licenciado en educación, investigador del Instituto de Investigación en Ciencias y Humanidades, directivo del Movimiento Capulí, Vallejo y su Tierra, docente universitario.

 

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