NEGROKA UNA VOZ AL SERVICIO DE LA CULTURA DEL PUEBLO

  Dr. Javier Delgado Benites (*) Este escrito lo realizó, porque hace unas semanas un familiar me ha enviado de Santiago de Chuco las ricas ocas espejas, que me han hecho recordar mi estancia en mi lar natal. Después de muchos años he comido dichas ocas. La oca es una planta oriunda de los andes, es uno de los cultivos más antiguos del Perú, se cultiva en pequeños terrenos, es parte de la alimentación del campesino y su entorno familiar. La oca es un tubérculo de fuente importante de vitamina C y de energía debido a su contenido de carbohidratos, las cantidades de proteínas y grasas son bajas. En Santiago de Chuco, se produce la oca en sus diversas variedades, dentro de ellas las ocas espejas, que vienen hacer un tipo de oca de color naranja pálido, diáfano y brilloso, pienso que ha eso se debe al llamarlo ocas espejas. Mi padre cultivaba dicha variedad de ocas en el pequeño terreno (chacra) que teníamos cerca de Yamanate, dicha cosecha era exclusivamente para comer, en otros casos

Amaybamba rincón del Cuzco milenario tierra del indómito Inca Pachacútec relieves agrestes de montañas verdosas de lluvias torrenciales habituales donde se enarbolaron banderas de lucha de la auténtica Revolución Peruana. Fidedigna eterna Mesa Pelada sepultura de guerreros indomables saturada de infinito luto inmortal viste morir a un hombre planetario gestor de la guerra de guerrillas que luchó con sagacidad justiciera. Ahí dió su último grito corajudo cual Quijote de mitológica leyenda Luis Felipe De la Puente Uceda cayó con el rostro frente al mundo sin escabullirse de la muerte descargó el último plomo a lado de Tupayachi y Escobar. Su arrojo de victoria no ha muerto sigue centellante de luz y fuego está citando a todos los revolucionarios para que empuñen el último sueño al cielo y luchen hasta lograr una patria libre si es posible inmolarse como él lo hizo en la quebrada de Choquellohuanca. Su sangre derramada es el semillero de curtidos y recios combatientes los miserables merce

Es el cumpleaños (61 años) de mi hermana ELIZABETH, que hace dos años y más de cuatro meses se ausentó de nuestro entorno familiar, para estar junto a mi padre Francisco, convirtiéndose en dos ángeles que nos protegen y nos guían a mi madre, mis hermanos, sobrinos y toda la familia, para ir por el mejor sendero de la vida. Un saludo y un abrazo hasta el cielo, estimada hermana.   Un verso que lo escribí el 20 de octubre del 2020   UN SALUDO HASTA EL CIELO   En este día de tu cumpleaños en esta estación de primavera todas las rosas están floreciendo reluciendo sus hermosos colores oliendo sus mejores perfumes.   En este día de tu onomástico han amanecido las avecillas cantan sus hermosas coplas con sus miradas hacia el cielo alegrando este día 20 de octubre.   En este día de tu aniversario será un día especial para la familia será un día donde te recordaremos los pasajes bonitos que vivimos y una oración por tu eterno descanso.   Te envi

Para mis padres que impulsan mi voz en libertad   Mi tierra de callecitas estrechas y ceñidas que tienen inicio pero no fin su gente noble treja andina anda pensativa y mohína imbuida en nostalgia.   Mi tierra de tejas de greda fértil que fulguran como flores rojas fruto de manos harapientas de los cholos chuquinos.   Mi tierra de balcones tallados de eucalipto y aliso de manos crishinas que embellecen la ciudad.   Mi tierra de corredores y zaguanes amplios con pilares tristes que invitan a inspirar versos que salen de las entrañas puras de sentimiento y fe. JAVIER DELGADO BENITES Trujillo, 2009  

(Al celebrarse el centenario de su publicación de Trilce)   Dr. Javier Delgado Benites (*) La Penitenciaría Central de Lima  (conocida como El Panóptico), fue construido entre 1858 e inagurado en 1860, en el gobierno de Ramón Castilla, se encontraba ubicado frente al actual Palacio de Justicia, entre las avenidas Wilson y Bolivia, (actualmente es el hotel Sheraton y el Real Plaza Centro Cívico de Lima). Fue demolido en 1964. En dicho establecimiento penitenciario funcionó en su interior los talleres tipográficos de la penitenciaría de Lima, donde se brindaba servicios  de imprenta y encuadernación, tales como impresión de boletines, revistas, memorias de autoridades, libros de contabilidad, códigos y reglamentos, así mismo, se imprimió libros por encargo de clientes particulares. Cuando Vallejo llega a Lima a fines de diciembre de 1917 y en 1918 entabla amistad con escritores limeños dentro de ellos José María Eguren, Abraham Valdelomar  siendo este último que vivía frente